Las plantas son seres vivos que se las han ingeniado para propagarse por la tierra de las maneras más insospechables a lo largo de millones de años. En este artículo hemos recopilado 7 para que las conozcas y las reproduzcas en tu casa.
1.Propagación por Semillas
Es el método más utilizado para reproducir las plantas aunque también es verdad que no todas producen semillas que sean adecuadas para plantar.
- Hacer semilleros en interior con tierra fértil y condiciones de humedad adecuada. La profundidad de siempre debe ser el doble al del tamaño de la semilla. Excepto las semillas finas que se esparcen por la superficie porque necesitan luz.
- Sembrando semillas directamente en la tierra donde queremos que crezca la planta. No es efectivo en todos los casos pero es mejor en guisantes y en hortalizas de raíz como las zanahorias. Aunque es verdad que el suelo debe estar bien abonado, mullido y con la humedad necesaria para que emerjan.
- Ciertas semillas no brotan mediante métodos tradicionales. Algunas necesitan que imites el invierno en la nevera, pues necesitan recibir el frío, otras las remojas en agua tibia o en ácido y otras les debemos escarificar algunas capas para que puedan brotar mejor.
2. Propagación por Esporas
Los musgos y los helechos se reproducen por esporas y para que se propaguen debemos hacer los siguientes pasos:
- Recortamos una hoja que tenga esporas marrones y la metemos en una bolsa.
- Preparamos una bandeja con tierra húmeda y vertemos las esporas.
- Lo cubrimos con una lámina transparente de plástico o vidrio para retener la humedad.
- Colocamos en un lugar luminoso lejos de la luz solar directa.
- Después de varios meses o semanas aparecerán unas pequeñas «hojas» en forma de corazón, son las futuras plantitas.
3. Propagación vegetativa
La simple división de grandes grupos de una planta, podemos obtener muchas plantas pequeñas a partir de una grande. Como es en el caso de los bulbos, tuberculos, rizomas, estolones,hijuelos.
4. Propagación de las hojas
Muchas plantas suculentas se reproducen a partir de hojas enteras. Rompemos las hojas inferiores moviéndolas hacía un lado, las dejamos secar unos días y la plantamos en una maceta, con el tiempo saldrán pequeñas plantitas.
5. Propagación desde el tallo
Los esquejes de tallos blandos son ideales para algunas plantas, simplemente cortar un trozo terminal y plantarlo en la tierra. Para el caso de los tallos leñosos, debemos cortar un trozo terminal y ponerlo en remojo durante un tiempo para que eche raíces, los cortes los debemos hacer en invierno que es cuando están en latencia. Debemos mantenerlos en un lugar con luz lejos de sol directo.
6. Injerto
Consiste en quitar una yema de un árbol que queramos obtener una característica que nos interese como puede ser que de más fruto y lo ponemos en otro árbol conocido como patrón que tiene la característica que es más resistente a cierto tipo se suelo. Para ello debemos cortar otra yema parecida y pegarle la yema del primer árbol, lo unimos con cinta para injertos y cortamos la rama superior al injerto que hemos realizado.
7. Tallos subterráneos y raíces
Algunas plantas tienen tallos subterráneos cuyas raíces les salen del mismo tallo, es muy simple, cortamos el tallo en varios trozos y los plantamos, ya tenemos varias plantas a partir de una. En cuanto a las raíces es lo mismo, los esquejes de raíz los podemos plantar y nos saldrán pequeños brotes, como por ejemplo la menta.
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